Adaptarse o morir ha sido la clave de 2020. Los cambios radicales en la forma de comprar de los clientes han llevado a los retailers a innovar con más rapidez y eficacia que nunca. Para seguir prosperando, se han visto obligados a implementar procesos de compra online y recogida en tienda y a optimizar los sistemas de inventario para garantizar la disponibilidad de los productos.
Compras navideñas en el año del cambio: el salto del ecommerce al edge