¿Qué es RDP?

El Protocolo de escritorio remoto o Remote Desktop Protocol (RDP) es un estándar de software desarrollado por Microsoft que permite a los usuarios conectarse y utilizar otro ordenador de forma remota. El RDP es un estándar de software desarrollado por Microsoft que permite a los usuarios conectarse y utilizar otro ordenador de forma remota.

  • Funcionalidad básica: El RDP funciona en varios sistemas operativos, incluidos Windows, Linux, macOS, iOS y Android, lo que permite a los usuarios conectarse de forma remota a diversos sistemas. 

  • Características del protocolo: Además de la compartición básica de pantallas y la transferencia segura de archivos, el RDP ofrece funcionalidades como el streaming de imágenes y vídeo, así como el streaming bidireccional de audio, que resultan muy útiles para reuniones virtuales y aplicaciones multimedia.

  • Puerto predeterminado: El RDP opera principalmente en el puerto TCP 3389, lo que puede suponer un riesgo para la seguridad, ya que los atacantes suelen dirigirse a él.

  • Métodos de autenticación: El RDP admite varios métodos de autenticación, incluidas las combinaciones tradicionales de nombre de usuario y contraseña, así como opciones biométricas a través de Windows Hello, que permite iniciar sesión de forma segura mediante reconocimiento facial o escaneo de huellas dactilares.

  • Cifrado: El protocolo utiliza un cifrado estándar integrado para la transmisión segura de datos y protege la información compartida a través del RDP.

  • Casos de uso: El RDP se utiliza habitualmente para el trabajo remoto, la asistencia técnica y la gestión de servidores.

Riesgos comunes de seguridad de RDP

Aunque los protocolos de escritorio remoto (RDP) son sólidos por lo general, tienen debilidades explotables cuando no están bien protegidos. Entender cómo podrían utilizarse estas vulnerabilidades para violar la seguridad de tus conexiones es esencial, ya que te ayuda a decidir cuál es el mejor enfoque para proteger tus datos.

Los riesgos de seguridad comunes asociados con los RDPs incluyen:

  • Ataques de fuerza bruta: Utilizan herramientas automatizadas para adivinar repetidamente las credenciales de acceso hasta que se consigue entrar. Este método es especialmente eficaz contra los sistemas que tienen contraseñas débiles y políticas de bloqueo inadecuadas.

  • Robo de credenciales: Algunos atacantes despliegan tácticas de intermediario (también llamadas «man-in-the-middle») para robar datos de inicio de sesión durante el proceso de autenticación. A continuación, utilizan las credenciales robadas para acceder al sistema. 

  • BlueKeep y vulnerabilidades relacionadas: Los sistemas operativos antiguos, incluidas las versiones obsoletas de Microsoft Windows, suelen contener vulnerabilidades de seguridad, como BlueKeep. Estas debilidades pueden permitir a los atacantes ejecutar código de forma remota sin necesidad de autenticación de usuario, mediante la explotación del RDP.

  • Ataques de denegación de servicio (DoS): Al saturar los servidores RDP con solicitudes de conexión, los ataques DoS pueden bloquear temporalmente el acceso de los usuarios legítimos, lo que provoca tiempos de interrupción y pérdidas de productividad. Estos ataques pueden resultar muy costosos para las organizaciones que dependen en gran medida del RDP para el trabajo remoto y la gestión de servidores.

  • Amenazas internas: Aunque a menudo se pasan por alto, las amenazas internas están en aumento, especialmente en entornos de trabajo híbridos en los que se comparte el acceso remoto. Los usuarios autorizados que actúan con malas intenciones pueden filtrar datos sensibles o interrumpir las operaciones de forma intencionada, lo que supone un grave riesgo para la continuidad de la empresa.

  • Puerto RDP expuesto: El puerto TCP 3389, que es el puerto RDP estándar, es muy susceptible a los ataques de escaneo y de fuerza bruta si se deja abierto a internet. Si se expone este puerto, se le está proporcionando a los atacantes una ruta directa a los servidores de la empresa, lo que aumenta las posibilidades de acceso no autorizado.

9 formas de mitigar los riesgos de seguridad del RDP

Comprender los riesgos asociados al RDP es solo el primer paso, ya que reducir estos riesgos de forma efectiva requiere un enfoque global de la seguridad. Ninguna medida por sí sola puede proteger completamente tu red, por lo que es crucial adoptar varios niveles de defensa para reforzar las conexiones RDP frente a posibles ataques.

Algunas estrategias sólidas que reducen la vulnerabilidad de los escritorios remotos incluyen:

1. Implementar una autenticación fuerte

Plantéate implantar la autenticación multifactor (MFA) al exigir a los usuarios que proporcionen algo que conocen (por ejemplo, una contraseña) junto con algo que tienen (por ejemplo, un código de una aplicación de autenticación) para iniciar sesión. Exige el uso de contraseñas largas y complejas (de al menos 8 caracteres) que incluyan letras mayúsculas y minúsculas, números y símbolos. 

2. Autenticación a Nivel de Red (NLA)

Activa la autenticación a nivel de red (NLA) para que tu sistema compruebe las credenciales del usuario antes de establecer una sesión RDP completa. De este modo, los atacantes no podrán explotar el propio servicio RDP para acceder. 

3. Restringe el acceso RDP

Sé selectivo con respecto a quién permites el acceso RDP. Configura un cortafuegos que bloquee el acceso RDP desde direcciones IP públicas en Internet y permite únicamente conexiones desde rangos internos específicos o VPN que designes. 

También puedes segmentar partes de tu red para restringir qué sistemas pueden comunicarse a través de RDP en función de su dirección MAC o de protocolos específicos. Limitar la superficie de ataque reduce considerablemente la probabilidad de que se produzcan conexiones RDP no autorizadas.

4. Parcheos regulares

Los ciberdelincuentes buscan constantemente nuevas vulnerabilidades, por lo que es fundamental actualizar el software con las últimas correcciones de seguridad.

5. Monitorización y registros

Implementa un registro detallado y una monitorización en tiempo real de todas las sesiones RDP para detectar actividades sospechosas, como intentos de inicio de sesión repetidos y fallidos o desde ubicaciones u horas inusuales. La detección e investigación temprana de las señales de alarma permite proteger el RDP antes de que los incidentes se conviertan en violaciones de la seguridad.

6. Limitar los privilegios de los usuarios

Al configurar el acceso RDP, a las cuentas de usuario solo se les deben otorgar los privilegios mínimos necesarios para realizar su trabajo. Limitar los privilegios reduce el daño en caso de que un perfil se vea comprometido, y evita el movimiento lateral a través de tu red.

7. Cambia los puertos predeterminados

Los ciberdelincuentes suelen buscar sistemas con RDP activado en el puerto predeterminado, el 3389. Cambiar a un puerto no estándar con un número alto reduce las posibilidades de que los atacantes encuentren y ataquen tu servicio RDP en los análisis automatizados. 

8. Poner en marcha políticas de bloqueo de cuentas

Para protegerte de los ataques de fuerza bruta, aplica una limitación de frecuencia que bloquee las cuentas durante al menos 15 minutos después de seis intentos fallidos. De este modo, se frustran los intentos repetidos de inicio de sesión rápido, al tiempo que se minimiza la interrupción de los usuarios legítimos que introducen mal las contraseñas.

9. Utilizar Remote Desktop Gateway

Un servidor RD Gateway actúa como un salto adicional para el tráfico RDP y valida las conexiones antes de que lleguen a tu red. Tus usuarios se conectan primero al servidor, que reenvía las sesiones autorizadas a su destino final. Esta estrategia proporciona una capa adicional de seguridad y un control de acceso más granular para proteger mejor las conexiones RDP.

Cómo Fastly mejora la seguridad de RDP

Los RDP son una herramienta muy útil para el acceso remoto. Aunque, en general, son seguros, siguen siendo vulnerables a amenazas críticas de seguridad que requieren la implementación de medidas estrictas para evitar accesos no autorizados y violaciones de la seguridad de los datos.

Es esencial implantar medidas de protección sólidas, como la autenticación multifactor y el control de acceso, para evitar violaciones de la seguridad costosas.

Fastly ofrece una protección sólida contra las vulnerabilidades más comunes, lo que te permite reforzar la seguridad de tu RDP. Las sólidas características de seguridad de la plataforma reducen significativamente los puntos débiles relacionados con las conexiones remotas, como el RDP, que suele ser objeto de ataques de fuerza bruta, inyecciones de malware y amenazas de intermediario o «man-in-the-middle» (MitM). 

Algunas soluciones clave de Fastly que ayudan a proteger los RDP son:

  • Firewall de aplicaciones web (WAF): El WAF de última generación de Fastly protege mediante el bloqueo del tráfico malicioso dirigido a tu infraestructura RDP.

  • Protección DDoS: Los servicios de mitigación DDoS de Fastly garantizan que tu servicio RDP siga funcionando durante los ataques volumétricos, lo que permite a los trabajadores remotos seguir trabajando sin interrupciones.

  • Seguridad edge cloud: Dado que Fastly procesa las peticiones de conexión más cerca de los usuarios, la latencia es baja y las conexiones están cifradas, lo que reduce el riesgo de ataques de intermediario en sesiones remotas.

  • Cifrado TLS: Al utilizar Fastly, la comunicación a través de redes públicas se cifra con los protocolos TLS más recientes, lo que aumenta la seguridad de las conexiones RDP.

  • Monitorización y creación de registros en tiempo real: Fastly proporciona creación de registros y monitorización en tiempo real, lo que permite rastrear y gestionar actividades sospechosas en varias sesiones de RDP.

  • Arquitectura zero trust: Los marcos de seguridad zero trust integrados con Fastly garantizan que solo los usuarios autorizados puedan acceder a las conexiones RDP.

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