Anunciamos nuestro nuevo POP en Christchurch (Nueva Zelanda)
Nos hace mucha ilusión anunciar un nuevo punto de presencia (POP) en Christchurch (Nueva Zelanda), que nos permitirá ofrecer a agencias públicas del país, así como empresas de todo tipo, más resiliencia, mayor disponibilidad de la red y más servicios de recuperación de fallos. Este nuevo POP sigue nuestra estrategia de desplegar menos POP pero más potentes en lugares bien comunicados de todo el mundo, con el objetivo de aumentar la capacidad, disminuir la latencia y mejorar el rendimiento para los usuarios finales.
Experiencias digitales rápidas, seguras y escalables para los usuarios finales
Esta nueva instalación en la isla meridional del país mejora la velocidad y la seguridad a la hora de acceder a algunos de los principales sitios web del mundo, que funcionan con Fastly, mediante soluciones como el WAF de última generación de Fastly, desarrollado en Compute@Edge. El WAF de última generación de Fastly proporciona seguridad en cualquier lugar y evita que las actividades maliciosas afecten a los servicios de nuestros clientes.
Además, estos aprovechan la velocidad, la escalabilidad y la estabilidad de nuestra red de edge cloud para impulsar sus experiencias digitales y dar cabida a aplicaciones modernas y dinámicas. Otra ventaja importante es que el POP de Christchurch ofrece mayor velocidad a los clientes de Nueva Zelanda y protege los servicios en caso de apagones en otros lugares de este país, tan acostumbrado a los terremotos. Los usuarios de Queenstown y Dunedin verán cómo las sesiones de TLS se terminan más cerca, lo cual reducirá drásticamente la latencia del tiempo hasta el primer byte. Así, mejorarán tanto la distribución de streaming multimedia como la rapidez de sitios web de comercio electrónico y otras páginas populares en el país, como Trade Me y Stuff.
La elección de ubicaciones de POP y la creación de nuestra red mundial
Hemos aplicado una estrategia poco común a la hora de crear nuestra sólida red mundial y el potente software que ejecuta: al contar con menos POP, pero de mayor rendimiento y situados estratégicamente en 71 ubicaciones en todo el mundo (a 31 de diciembre de 2021), incluidas cuatro en Australia y ahora tres en Nueva Zelanda, nuestra red precisa de menos hardware que las CDN antiguas para ofrecer experiencias digitales rápidas, seguras y resilientes, estén donde estén los usuarios.
Usamos una infraestructura óptica de 100 gigabits para conectar los POP a Internet, y es así cómo logramos distribuir sitios web, API y aplicaciones web innovadores con baja latencia. Todos los POP están equipados con el llamado Precision Path, que detecta automáticamente problemas de conexión temporales y redirige el tráfico. Dichos problemas pueden ocurrir al recuperar contenido de tus servidores de origen o al distribuir contenido a usuarios finales desde la red de edge cloud.
Además, cada POP dispone de su propio conjunto de interruptores y componentes de bastidores repetidos, que aporta a los clientes mayor redundancia y flexibilidad. Cabe señalar que los POP cuentan con una estructura interna resiliente con múltiples niveles de recuperación de fallos dentro del bastidor. Por último, usamos unidades de estado sólido en todos los nodos de caché, lo cual promueve todavía más la velocidad y la resiliencia.
Nuestro compromiso con el crecimiento
La nueva infraestructura de Christchurch se une a los POP de Australia y Nueva Zelanda, en Sídney, Melbourne, Brisbane, Auckland y Wellington, todos ellos alojados en centros de datos neutros. Esta reciente expansión en Christchurch minimiza las posibilidades de fallos para clientes de toda la región, incluidas Nueva Zelanda, Australia y Fiyi, al repartir los recursos en dos zonas de disponibilidad distintas, o incluso en múltiples regiones.
Ante la demanda de experiencias digitales más dinámicas y de mayor rendimiento, estamos muy contentos de ampliar nuestra red para estar a la altura de esas expectativas.